PRESO POR «ROBAR» EN SU PROPIA TIERRA
La semana pasada Claiton Duarte, cacique de la Aldea Renacer de Mado, fue víctima de un nuevo atropello por parte del empresario Duilio Zallio.
La comunidad, integrada por 12 familias, está en el Kilómetro 4 de Mado-Delicia. Según relató el propio cacique a La Otra Campana, cosecharon 4 raídos del monte para comprar mercadería. Los llevaron al pueblo en un auto prestado. En el camino fueron interceptados por el empresario maderero que los acusó de robarles «su» yerba, llamó a la policía y se lo llevaron detenido.
Sin embargo, Claiton se comunicó rápidamente con las organizaciones sociales que defienden los derechos de los pueblos originarios, y luego de 2 horas fue liberado.
El joven cacique, de tan sólo 24 años, reitera a quien quiera oirlo que la aldea Aguai Poty fue relevada en los términos de la Ley 26160. Por lo tanto tienen el derecho de vivir según sus costumbres ancestrales.
De todos modos, según denuncian distintas organizaciones, posteriormente al relevamiento el empresario compró las tierras a precio vil.
Cuenta el cacique que están «produciendo en las huertas y producciones anuales, limpiando las chacras. Estamos trabajando tranquilamente. Se nos ocurrió cosechar yerba que había en el monte. Cosechamos, porque es nuestro derecho».
Relató que «le pedimos a un compañero que siempre colabora con la comunidad que nos llevara la yerba. Era un cochecito con un carrito. Llevamos 4 raídos».
Y continuó: «El empresario, supuesto dueño de estos lotes donde estamos asentados nos persiguió. Nos alcanzó en la ruta, iba en su camioneta con el capataz y una persona más. Pusieron adelante el auto arriesgando nuestra vida. Le dije al chofer que se detenga al costado de la ruta para hablar».
«Ahí nos acusó de ladrones, que estamos robando. Yo le dije que estamos en el relevamiento. Ahí ya nos discriminó, nos agredió psicológicamente, nos decía indios de mierda, palabras que siempre nos hace escuchar la gente».
Claiton continuó su relato: «Entonces dije bueno, dejamos nomás acá y nos vamos para nuestra casa. Simplemente estamos tratando de vender para comprar mercadería para la familia».
«Pero dijo no, vamos a llamar a la policía. Llamaron, a los 20 minutos llegó la policía que actuó bajo las órdenes del empresario. Nosotros explicamos pero nos dijeron que es un robo, que somos ladrones. Nos esposaron, nos llevaron a la comisaría. Nos decían que esa es nuestra casa por ser ladrones».
Finalmente, «Me pude comunicar con los compañeros de la UTT que nos acompañan. Junto a productores se organizaron rápidamente con abogados y en 2 horas nos sacaron».
Claiton cuenta que está formando familia con su compañera. Todos viven en forma muy precaria, y tienen que buscar el agua en una vertiente que está a más de 1000 metros. Acarrean los bidones en una carretilla.
«Nosotros nada más queremos vivir y trabajar en paz», insiste. Y cuenta que «el empresario había plantado eucaliptus. Lo estamos cortando y utilizando, pero queremos reemplazarlo por mandioca, maíz, toda la producción anual. Para nosotros el eucalipto no es alimento».
El empresario
En junio de 2016 la Red Provincial de Organizaciones y Pueblos Originarios lo denunció por haber quemado la vivienda de Beatriz Mendoza. Es una pequeña productora de la zona, madre de dos hijos pequeños. Zillio la había amenazado en varias ocasiones.
El empresario maderero pertenece a una familia de Eldorado con 30 años en el rubro de madera nativa e implantada. Provee a la industria de la construcción y a los fabricantes de muebles. Según consigna en las redes, «su filosofía de trabajo está fuertemente vinculada al cuidado del medio ambiente, con vocación de servicio, junto con una formación integral de sus recursos humanos, responsabilidad y honestidad».
