PIDEN PROTEGER SEMILLAS NATIVAS Y CRIOLLAS
Agricultores, profesionales de la salud y ambientalistas presentaron hoy al vicegobernador y gobernador electo, Oscar Herrea Ahuad, y a los distintos bloques de la Cámara de Diputados de Misiones, un proyecto de ley que tiene como objetivo proteger y multiplicar las semillas nativas y criollas para garantizar la biodiversidad y la soberanía alimentaria en la provincia de Misiones.
En una reunión que se extendió por más de dos horas en la Casa de Gobierno, los visitantes plantearon y fundamentaron a Herrera Ahuad su enérgico rechazo al programa que el Gobierno de la Nación inició y que prevé sembrar maíz de alto rendimiento en 500 mil hectáreas, de las cuales 100 mil son ocupadas por yerba mate, según se desprende de un documento del entonces Ministerio de Agroindustria nacional, con daños sociales, económicos y ambientales para las poblaciones locales.
En respuesta, el vicegobernador expresó el compromiso de apoyar el proyecto de ley y fortalecer la producción de semillas criollas y nativas, para lo cual puso a disposición todas las herramientas gubernamentales, especialmente las ligadas a la Secretaría de Agricultura Familiar y la Biofábrica.
“Siempre estuvo el compromiso de trabajar en conjunto; vengo del trabajo de consenso y creo que Misiones es una provincia que debe crecer defendiendo su naturaleza y cultivando responsablemente”, dijo Herrera Ahuad. “Vengo de la salud y quiero un pueblo sano”, garantizó ante el planteo del efecto dañino que provocan los transgénicos en la sanidad de la población.
Participaron Mariana Mampaey, médica rural y pionera en medicina antroposófica; los productores agroecológicos Miriam Zamudio, de la Cooperativa de Productores Independientes de Piray; Eugenio Leste de Pozo Azul, San Pedro; Ernesto Rodríguez, de Comunidad Campesina por el Trabajo Agrario de San Pedro; Juan Daddario, del Movimiento de los Trabajadores Excluidos, y Eduardo Vázquez, Cooperativa Parajes Unidos de Puerto Libertad. También, el abogado Martín Ferroni, el dirigente socio ambiental Rulo Bregagnolo, el referente en educación y agrocología Raúl Aramendy, y la periodista Cristina Besold, todos del Frente Ciudadano Ambiental Kaapuera. Además estuvieron presentes Marta Ferreira, ministra de Agricultura Familiar, y el ingeniero José Cabral y Carlos Galián, presidente y gerente, respectivamente, de la Biofábrica.
LEY DE PROTECCIÓN
El proyecto se denomina Ley de Reparación Histórica, Tutela y Promoción de Uso de las Semillas Nativas y Criollas. Establece “garantizar el derecho de todas las personas a definir e implementar libremente sus estrategias y modos de obtención, producción, investigación, innovación, almacenamiento, conservación, intercambio, comercialización, distribución y consumo de semillas nativas y criollas” porque de esta forma se asegurará la “soberanía alimentaria, sanitaria, tecnológica, justicia ambiental y desarrollo agroalimentario”.
En esa línea, se impulsa “declarar de interés público las semillas nativas y criollas, las semillas elaboradas, generadas y/o mejoradas con saberes populares, los cultivares tradicionales, y los conocimientos asociados a los mencionados”.
La propuesta hace hincapié en el derecho de los habitantes al “uso propio gratuito de las semillas de su cosecha, sin restricción de ningún tipo en el ámbito de todo el territorio provincial”, y en el derecho humano colectivo de los pueblos campesinos e indígenas de “decidir sobre sus estrategias y modos de conservarlas y comercializarlas” y de “participar de cualquier asunto que los afecte directa o indirectamente”.
Asimismo, enfatiza sobre Derechos de Género cuando pide “garantizar a las mujeres (…) el libre acceso a las semillas nativas, criollas y cultivares tradicionales, para producir alimentos sanos y nutritivos (…) ”, y en ese marco, solicita prioridad a políticas públicas que tengan por objeto el fortalecimiento de la Soberanía Alimentaria“.
Los artículos 8 y 9 refieren al apoyo logístico y financiero que debe brindar el Estado para el “resguardo y almacenamiento de semillas nativas, criollas y cultivares tradicionales, como así también de producción y multiplicación”; y para “el desarrollo regional y municipal de ferias de semillas, promoviendo la conservación de la cultura criolla e indígena y la biodiversidad de los alimentos”.
Se promueve “la investigación participativa y gestionada asociativamente, la formación, el acompañamiento técnico y la innovación sobre la agrobiodiversidad y la agroecología”, y especialmente “la participación social y comunitaria” para alcanzar los objetivos, para lo cual prevé la consulta pública ante cualquier proyecto que represente potencial daño para las semillas y la conformación de Consejos Consultivos Municipales de Semillas, garantizando la participación de representantes de organizaciones de la agricultura familiar, campesina e indígenas.
A fin de visibilizar decididamente la importancia del tema, la iniciativa solicita que sea creado el Instituto Misionero de Semillas, “una entidad autárquica, de derecho público y descentralizada, que funcionará en la órbita de la Secretaría de Estado de Agricultura Familiar de la Provincia de Misiones, o el organismo que en el futuro cumpla con las funciones de ésta”.
Este organismo, se indica, “será el órgano rector de la política de protección y fomento a la producción nacional de semillas nativas y criollas” y “dará prioridad en su presupuesto a la ejecución de planes, programas, y/o actos particulares, que prioricen la adquisición de los cultivos de las semillas nativas, criollas y/o cultivares tradicionales, de los productores de la agricultura familiar”, instrumentará planes y/o programas destinados a facilitar “el acceso a bienes de capital e insumos básicos” y “la regularización de la titularidad dominial” de dichos productores».