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ESCUELA CENTENARIA REQUIERE REPARACIÓN

La comunidad educativa de la Escuela 12, de Caá Yarí espera desde hace varios años que el estado provincial se ocupe de refaccionar el edificio. Es un centenario establecimiento de la zona agrícola de Leandro N. Alem.

Ante esta preocupación, el diputado Jorge Páez, del bloque Tierra, Techo y Trabajo presentó un proyecto de comunicación, solicitando la construcción de un nuevo salón de clases. Además, la reparación de cuatro aulas y la oficina de la dirección escolar.

La escuela está en el lote 14 del ensanche Colonia Bonpland, jurisdicción de Caá Yarí, a ocho kilómetros de Alem. Se inauguró en septiembre de 1917.

Alberga a más de 20 niños y niñas en el NENI 2076, y a cerca de 100 alumnas y alumnos en el nivel primario.

Después de diversas reuniones y asambleas, la comunidad educativa decidió elaborar un proyecto pidiendo reparación y ampliación edilicia a las autoridades del Ministerio de Educación. Se canalizó a través de la Supervisión Zonal V. 

«Entendemos que debido al enorme deterioro es necesario un plan de obras con una inversión de 6.500.000 pesos», fundamentó el legislador.

«Necesitamos un edificio nuevo»

Isabel Pereyra es una de las docentes que trabajó en el proyecto de reparación y ampliación de la escuela, para presentar el pedido a la Supervisión Escolar.

«En realidad el establecimiento está tan deteriorado que necesitamos una escuela nueva; teniendo en cuenta que es la única de nivel primario más grande de esa zona que se sigue poblando muchísimo», dijo.

A eso se suma que las familias del lugar carecen de espacios verdes, plazas y lugares de esparcimiento para sus hijos e hijas. En la Escuela 12 actualmente funciona un solo turno y está disponible el horario de la tarde. Porque antes estaba el nivel secundario, pero lo trasladaron a una escuela nueva de la zona urbana del pueblo.

«Y como está previsto implementar la escuela de jornada completa o extendida, se podría ampliar las instalaciones para realizar talleres. Y que los alumnos y alumnas puedan estar más contenidos; que la escuela pueda ayudar a la comunidad y tener un espacio para un gabinete psicopedagógico. Por ahora contamos con uno de Alem, que cada tanto concurre a dar charlas para que los chicos y chicas tengan contención», expresó.

Frío excesivo y electricidad precaria

Los salones más antiguos para el dictado de clases de la Escuela 12, fueron construidos de madera y piso alisado. Eso contribuye a la excesiva humedad. Así, docentes y alumnado padecen mucho frío en épocas invernales, que se agrava por la proximidad del Arroyo Arriame, a sólo 100 metros del establecimiento.

La precariedad del edificio aumenta los riesgos generados por una endeble instalación eléctrica. Esta situación y el paso del tiempo indefectiblemente fueron deteriorando las condiciones edilicias. Al volver a las clases presenciales, el dictado en algunos grados se debe hacer en el espacio destinado al comedor o al SUM escolar.

Tal como manifiestan los docentes y directivos de la institución, todos los años y especialmente «en invierno es muy difícil dar clases»; problemática que favorece el ausentismo y la deserción escolar.


Mejor infraestructura para fomentar otras actividades

Sin embargo, a pesar de la deserción registrada, y teniendo en cuenta el loteo de zonas aledañas y la expansión urbana, se prevé que la matrícula de la Escuela 12 aumente en los siguientes años. 

Además, los alumnos y alumnas -en su mayoría hijos e hijas de agricultores- reciben la copa de leche. Esto es muy importante para la comunidad donde no abunda la generación de empleo. Es así que estas condiciones indican una proyección de que a futuro la Escuela 12 pueda funcionar con jornada completa.


«Creemos que por la historia de la institución y la gran importancia para la comunidad de Caá Yarí, es prioritario proveer un espacio digno y adecuado para los niños y niñas. Deben acceder a nuevas posibilidades de aprendizaje, y sentirse en un ambiente seguro, protegidos del frío y la humedad. Además se podrán concretar otros objetivos institucionales como fomentar actividades socio-culturales y talleres formativos y recreativos para los educandos», destacó Páez, del Bloque TTT.     

FUENTE: PRENSA TTT