CACHO AL CONGRESO
Según los resultados provisorios de las elecciones del domingo, el Frente de Todos logró dos bancas de las cuatro en juego: Cristina Britez y Cacho Bárbaro. La Renovación ubicó a Diego Sartori y Cambiemos a Alfredo Schiavoni.
Cacho Bárbaro posiciona de ese modo al Partido Agrario y Social, una fuerza política emergente de la provincia, en el escenario nacional. Maestro, director de escuela, abonó su vocación de servicio en Colonia Aurora, en el Alto Uruguay. Fue delegado municipal en Alicia Baja, desplegando su ayuda incansable a todos los colonos que necesitaran una mano.
Cacho fue diputado provincial de la Renovación. Luego formó su partido y con esa base logró la reeleción dos veces. Al finalizar el tercer mandato tuvo un gran gesto de generosidad, extraño en la política: dio un paso al costado, fue al llano, y dejó lugar a otros. Así fue que Isaac Lenguaza, Cali Goring y Giuliana Perini se sumaron a Martín Sereno en un bloque legislativo sólido y productivo.
Y Cacho siguió construyendo, sin cargos. Desde los tiempos de maestro, su tarea escolar se desplegó en una población tabacalera. Allí conoció los padecimientos de los productores que dejan la vida en el tabaco y cobran miseria. Entonces plantó tabaco. Como pequeño productor disputó la conducción de APTM. Vio que no podría con el poder acumulado de la dirigencia del sector, y armó otra institución: ACTIM. Fortalecida en estos años, demostró que el volumen de dinero que llega en concepto de FET y otros rubros, invertido como corresponde, mejora la calidad de vida de los tabacaleros.
Sumó además en estos años a las organizaciones sociales como el Movimiento Evita, de la mano de su conductor en la provincia, Martín Sereno. Y trabajó sin descanso. El acuerdo con el Partido Justicialista para integrar el Frente de Todos, con un llamado de Alberto Fernández de por medio, fue la herramienta indicada en el momento preciso.
El PAyS pasa ahora a jugar en las ligas mayores. Es la coronación de un trabajo inmenso en favor de los sectores más postergados de toda la provincia. Es un desafío importante porque junto a Cristina Britez deberá concitar el interés del Congreso Nacional, con más de 250 voluntades diversas.
El triunfo del Frente de Todos augura un tiempo de transformaciones. Alberto Fernández dio señales de que el signo será federal. Es de esperar entonces que los viejos anhelos de reparación histórica de los misioneros puedan concretarse. Y Cacho Bárbaro demostró que una fuerza política autónoma es posible en la provincia.